La banda chilena de Death Metal "Pentagram" es un verdadero hito para el nacimiento de este movimiento musical. Entre 1985 y 1987 sacaron dos demotapes (o casetes de demostración) y un vinilo con dos canciones, que revolucionaron al mundo chileno del metal. Un mundo que entonces era precario, artesanal, pero firme y sediento de buen rock. Son muchísimas las bandas importantes a nivel internacional que han reconocido su influencia y su carácter de pioneros. Desde Napalm Death hasta At the gates.
El libro de Jara está escrito en estilo rápido y sencillo, lleno detalles y descripciones de circunstancias íntimas que van tejiendo una crónica fiel, a veces humorística y descarnada, de esta banda ícono del death metal nacional. La historia trágica de una agrupación metalera que debería estar en la primera línea de la escena global y que luego de casi 28 años de silencio vuelve a los escenarios, como si nada hubiera ocurrido.
La dedicación puesta en la edición empastada, con papel de calidad y fotos esclarecedoras, no hacen sino trasladar al nuevo lector o al metalero que se crió en la edad oscura de fines de los 80, entre dictadura y pseudo democracia, a los orígenes del metal en Chile, a una época sin colores donde todo era en blanco y negro.
En resumen se trata de un libro indispensable para todo metalero que se precie como tal. Se trata del primer libro a una banda que refleja con agudeza una etapa muy decisiva para este movimiento, desnudando el tránsito por el cielo, el purgatorio y el infierno de Pentagram, una banda que nos conduce al origen y también al fin.
Pablo Hales
Patricio Jara (Antofagasta, 1974) es periodista y autor de Pájaros Negros, Crónicas del heavy metal chileno (2012). Además ha publicado, entre otras, las novelas Quemar un pueblo (2009) y GEología de un planeta desierto (2013).
Reseñas
ROCKAXIS / Pentagram. Una crónica de Patricio Jara, porJuan Guillermo Carrasco
EL MOSTRADOR / Pentagram, el libro que narra la muerte y resurrección de la banda chilena de metal más importante de todos los tiempos, por Pedro Hales